Sebastián Sánchez Martínez2
Jairo Antonio López Pacheco3
"Así pues, no queda más remedio que recorrer todo el círculo, pero esto no es
ni nuestro último recurso ni una deficiencia. Adentrarse por este camino es una
señal de fuerza y permanecer en él es la fiesta del pensar, siempre que se de
por supuesto que el pensar es un trabajo de artesano"
Martin Heidegger.
1 Redactado en Octubre de 2007. El siguiente documento es producto de las actividades
realizadas por los autores, en el marco de conformación del Grupo de Estudios e
Investigaciones en Representaciones Sociales y Memoria Colectiva. Agradecemos los
comentarios y críticas hechas por el profesor Carlos Andrés Charry Joya. Departamento de
Sociología, Universidad de Antioquia. Presentado el 30 de Octubre de 2007 como ponencia
para el Tercer Foro de Estudiantes de Sociología, Universidad de Antioquia.
2 Estudiante de Filosofía, Instituto de Filosofía, Universidad de Antioquia;
ssm.sebastian@gmail.com
3 Estudiante de Sociología, Departamento de Sociología, Universidad de Antioquia;
jairolopez32@yahoo.es
2
Marvin Harris y el materialismo cultural
En el primer capítulo de su libro El materialismo cultural4 titulado Las
estrategias de investigación y la estructura de la ciencia, Marvin Harris(1927-
2001) sitúa su teoría tanto en el ámbito filosófico como en el de las ciencias
sociales. Indicando el problema que acá nos ocupa, a saber, el del esbozo de
la epistemología del materialismo cultural, se puede hacer una interpretación
pluralista de la obra de Harris en el sentido de pluralismo de teorías
antropológicas, sociológicas y filosóficas.
En efecto, como se puede ver en su
estrategia de investigación, los términos utilizados se refieren a diversos
horizontes teóricos que le sirven como herramienta conceptual para la
comprensión de las relaciones sociales. Considerando lo anterior, una
influencia muy visible en el trabajo de Harris es la de Karl Popper; la afiliación
de los planteamientos epistemológicos a la lógica de la investigación
popperiana son muy importantes y determinantes sobretodo en el momento de
intentar colocar su teoría dentro de una gran tradición filosófica y científica.
La superación de los planteamientos de Popper por la teoría de Harris, empero,
con sumamente claras debido a sus métodos de contrastación y a su definición
de la ciencia, por ejemplo, cuando Harris decide llamar a su maestro
"falsacionista ingenuo" 5 está intentando mostrar las limitaciones de la lógica
popperiana dentro de las teorías científico-sociales. Intentaremos mostrar muy
concretamente la superación de Harris en la siguiente formulación: mientras
que para Popper la falsación de una teoría se gestaba por métodos lógicos, al
menos en su fase lógica, para Harris el desarrollo de la ciencia es el desarrollo
competitivo de estrategias de investigación que compiten mutuamente para
resolver los enigmas de las relaciones y diferencias socioculturales; por otro
lado, la ciencia es un ejercicio del ser humano, organizado en comunidades
científicas, que intenta resolver problemas que le consternan de la
configuración del mundo y de sus relaciones sociales, que se lleva a cabo
mediante la construcción de sistemas de teorías que brindan categorías
conceptuales para la resolución de los problemas de comprensión(aunque no
sólo de comprensión) y que conforman estrategias de investigación.
Por último, el principal criterio metodológico que nos lleva a escoger una u otra estrategia
por encima de los demás, es la capacidad de las estrategias para ser falsadas
mediante operaciones empíricas de carácter público dentro de las
comunidades científicas, en síntesis, su capacidad de contrastabilidad. Como
último apunte a la definición de la ciencia de Harris, cabe nombrar el que tiene
que ver con la suma importancia del proyecto de:
[...]trascender los sistemas de creencias previos de tribus, naciones,
clases y comunidades religiosas y étnicas antagónicas, con el objeto
de alcanzar un conocimiento igual de probable ara cualquier espíritu
racional. A quienes dudan de la capacidad de la ciencia para realizar
este proyecto debe exigírseles que demuestren qué otra alternativa
ecuménica y tolerante puede hacerlo mejor. A menos que prueben
4 HARRIS, Marvin. El materialismo cultural. Trad. Gonzalo Gil Catalina, Madrid, Alianza, 1987,
pp. 20- 43.
5 Ibíd. p. 38
3
que algún otro sistema de conocimiento universalista conduce a
criterios de verdad más aceptables, su intento de desbaratar la
credibilidad universal de la ciencia en nombre del relativismo cultural,
por bienintencionado que sea, supone un crimen contra la
humanidad. Y esto es así porque lo que se denomina alternativa a la
ciencia no es, en realidad, la anarquía, sino la ideología; no se trata
de pacíficos artistas filósofos y antropólogos, sino de fanáticos
agresivos y de mesías dispuestos a aniquilarse mutuamente y a
destruir el mundo si así lo requiriese la demostración de sus puntos
de vista6
En esta vía, el pluralismo utilizado por Harris adopta críticamente teorías como
el funcionalismo, el positivismo, el marxismo, el estructuralismo, la
etnosemántica, el evolucionismo, entre otras. No siendo el objetivo acá por su
extraordinaria complejidad enumerar detalladamente qué aspectos acepta y
qué otros rechaza de cada una de dichas teorías, nos proponemos más bien
observar las diferentes estrategias de investigación que se proponen en el
materialismo cultural. La estrategia de investigación es concebida en el
materialismo cultural como "un conjunto explícito de directrices relativas al
estatuto epistemológico de las variables a estudiar, las clases de relaciones o
principios sujetos a leyes que probablemente manifiestan tales variables, y el
creciente corpus de teorías interrelacionadas a que la estrategia a dado lugar
hasta el presente"7. De esta manera, el materialismo cultural propone un nuevo
horizonte científicosocial para la comprensión de los sistemas socioculturales
mediante la formulación de su estrategia8.
Avanzando un paso más, la explicitación de las diferentes directrices que sirven
como base a la propuesta del materialismo cultural sería la siguiente: se
propone una "limitación de los campos de investigación a los acontecimientos,
entidades y relaciones cognoscibles por medio de procedimientos u
"operaciones" públicas de carácter explícito, lógico-empírico, inductivodeductivo
y cuantificable, susceptibles de replicación por parte de observadores
independientes"9. Otra consideración de las directrices es que si dichas
operaciones fueran aplicadas con total verticalidad, se anularía, por un lado, se
diálogo de la teoría y la prueba empírica así como la prueba empírica misma
que posee no un carácter del todo cuantificable teniendo en cuenta el círculo
cultural que la encierra. Consideremos, por ejemplo, el caso de los
homosexuales en Norteamérica en las décadas de los 70´s y 80´s. "Hacia
1980, en los Estados Unidos y Canadá, se había desarrollado la minoría
6 Ibíd., p.43. Cursivas mías.
7 7 Íbid., p 42. Cursivas mías
8 Vale aclarar que la preferencia de Harris de adoptar el término estrategia para designar el
marco general en que se concibe el materialismo cultural desechando opciones como
paradigma(Kuhn), tema(Holton), programas de investigación(Lakatos), tradición de
investigación(Laudan) y proyecto(Maxwel), reside en el hecho de que este término "tiene la
ventaja sobre paradigma, tema y tradición de que denota una explicitud conciente, y el
preferible a programa y proyecto, que llevan la connotación de rígida adhesión a una serie
preestablecida de observaciones y experimentos"(Ibídem).
9 Ibídem.
4
homosexual más grande, mejor organizada y más poderosa del mundo"10, los
métodos que utiliza Harris para aseverar dicho fenómeno consisten en la toma
de datos cualitativos extraídos de un estudio de otro investigador, allí se
ambienta el mundo homosexual de forma tal que entre los homosexuales hay
oferta y demanda de todo tipo de bienes de consumo así como de servicios e
información. Un ciudadano gay podía instalarse en una nueva ciudad a través
de agentes inmobiliarios, abogados y aseguradoras gay; si no conocía a nadie
podía consultar las páginas amarillas, periódicos o revistas gay o relacionarse
en ambientes exclusivos tales como librerías, bares, cafés, panaderías,
iglesias, restaurantes, discotecas o almacenes gay; si estaba desempleado
tenía múltiples opciones de vinculación laboral a cualquiera de los anteriores
ambientes y para informarse tenía canales de televisión y líneas telefónicas
exclusivas para gays. Las conclusiones que se sacan de estos datos consisten
afirmar que "los homosexuales formaron guettos por causas muy parecidas a
las de otras castas de parias y minorías, es decir, para poder convivir con
jovialidad y garantizar la autodefensa"11. De esta forma se dieron fenómenos en
grandes ciudades, New York, San Francisco o Los Ángeles, tales como barrios
enteros donde todos sus habitantes eran gays. Este ejemplo es útil para
mostrar una cantidad de datos operacionalizados por medio de la publicación y
la discusión de la investigación de Harris de datos cualitativos con contenido
empírico(hechos reales), datos explicados por la estrategia del materialismo
cultural susceptibles de ser considerados a la luz de otras teorías para indagar
sobre su capacidad explicativa y racionalizadora de relaciones sociales muy
específicas.
De acuerdo con el sitio epistemológico del que Harris reviste a su estrategia de
investigación, resta por nombrar la directriz fundamental del materialismo
cultural que sería en este caso el camino que lleva tanto a la concepción
particular de los acontecimientos, entidades y relaciones sociales como a la
posibilidad racional de comprender éstas últimas. Dicha directriz, en una
primera formulación, reza así: "[...]la vida social humana es una reacción frente
a los problemas prácticos de la vida terrenal"12. Esta particular forma de formar
criterios de entendimiento que aporta la estrategia de Harris permite
circunscribir los problemas que pretende explicar de modo que el camino
interpretativo que le da a los hechos y relaciones sociales toma la forma del
materialismo, aunque comprende de un modo más amplio los resultados que
dicho materialismo supone cuando entra en el amplio campo de la
interpretación que la cultura y el desarrollo de ésta brindan.
Lo que pensaba Harris al formular el materialismo era lo mismo que Marx y
Engels formulaban en la La ideología alemana. Parafraseando a estos autores
Harris incluye en su libro:
10 10 HARRIS, Marvin. La cultura norteamericana contemporánea: una visión antropológica.
Trad. Juan Oliver Sánchez- Fernández. Alianza, Madrid, 1996, p. 111.
11 Ibíd., p.124
12 Op. Cit. HARRIS, 1987, p.11.
5
Totalmente al contrario de lo que ocurre en la filosofía alemana, que
desciende del cielo sobre la tierra, aquí se asciende de la tierra al cielo.
Es decir, no se parte de lo que los hombres dicen, se representan o se
imaginan, ni tampoco del hombre predicado, pensado, representado o
imaginado, para llegar, arrancando de aquí, al hombre de carne y hueso;
se parte del hombre real que actúa... desde el primer punto de vista se
parte de la conciencia considerada como el auténtico individuo viviente;
desde el segundo... del propio individuo vivo y real13
Este principio materialista, es reformulado por Harris a la luz de algunas
ambigüedades que suscita en virtud de los términos. Él pregunta: ¿qué es el
individuo tal como realmente es? ¿qué significa hombre real que actúa? A raíz
de esas dificultades que tiene el propio Harris para conceptualizar relaciones
sociales mediante este tipo de materialismo, él adopta algunas distinciones
fundamentales en dos ámbitos: primero, las actividades que se realizan y
segundo, las concepciones que se tienen sobre esas actividades.
La cuestión ontológica que suscita el preguntarse por lo que realmente es no
preocupa a Harris, para él es claro que existe una fuerte distinción entre
materia e ideas; en cambio, la cuestión epistemológica es de suma
importancia. Las distinciones entre lo que se hace y lo que se concibe de lo que
se hace en las ciencias sociales es un asunto vital, si tenemos en cuenta que
acá no hay sujeto ni objeto sino individuos pertenecientes a diferentes grupos
que se observan entre sí. ¿Acaso acá hay inconvenientes con el problema
tradicional de la teoría del conocimiento que se formula en la percepción de un
objeto independiente del sujeto cognoscente? ¿Podremos alertarnos ante la
presunta presencia de un problema análogo al de los principios trascendentales
kantianos que afirman una solución psicológica y metafísica de categorías a
priori de aproximación a los objetos? ¿Serán los científicos sociales superiores
a los objetos que son en su ejercicio núcleo de la investigación en tanto
desarrollan conceptualmente sus categorías fundamentales? ¿O hay ya en la
duda misma una superación de los problemas de la metafísica trascendental
cuando se piensa a los científicos como seres comprometidos con estrategias
investigativas y víctimas de pasiones y problemas igual que sus "objetos"?
Harris se dirige a establecer unas distinciones con miras a la interpretación a
partir de las cuales pretende solucionar el dilema expuesto anteriormente. Las
distinciones epistemológicas del ámbito ontológico que considera al hombre
están orientadas a diferenciar las actividades humanas entre conductuales
(reales) y mentales(ideales). El flujo conductual es el referido a las acciones
realizadas efectivamente, a los movimientos del cuerpo y los efectos
ambientales que suponen esos movimientos. Por su parte, los flujos mentales,
hacen referencia a los pensamientos y sentimientos. En ese sentido nuestro
antropólogo intenta ir más allá de las consideraciones clásicas de la
antropología que se concentraban en las actividades mentales de los
individuos. En este orden, propone las operaciones emic y etic como dos
enfoques de su estrategia de investigación que le permiten moverse
13 MARX, Karl y ENGELS, Frederick. La ideología alemana. Citado por: HARRIS, Marvin. El
materialismo cultural. Trad. Gonzalo Gil Catalina, Madrid, Alianza, 1987, p. 45.
6
continuamente entre las actividades conductual y mental con el objetivo tanto
de integrar como de distinguir las percepciones de los actores y del
investigador; Harris adopta en este punto una forma de estudio de la lingüística
antropológica de Kenneth Pike quien distingue las formas de estudio de los
sonidos de un lenguaje entre fonéticas y fonémicas. Las operaciones emic se
refieren a "sistemas lógico-empíricos cuyas distinciones fenoménicas o
«cosas» están hechas de contrastes y discriminaciones que los actores
mismos consideran significativas, con sentido, reales, verdaderas o de algún
otro modo apropiadas"14, en suma, una operación emic considera al actor como
perceptor único y último de sus actividades. Las operaciones etic, por otro lado,
se refieren a "distinciones fenoménicas consideradas adecuadas por la
comunidad de los observadores científicos[...] una etnografía realizada de
acuerdo con principios etic es, pues, un corpus de predicciones sobre la
conducta de clases de personas"15. La reconstrucción del ejemplo que da
Harris es la siguiente: en el estado de Kerala de la India meridional, la
tendencia de mortalidad de los terneros machos era mucho mayor que de las
hembras, cuando se les preguntaba a los nativos por la razón ellos decían que,
en general, los machos comían menos que las hembras y morían de hambre
por esto y que, dado que todos los animales tienen el mismo derecho a la vida,
ellos nunca pensarían en disminuir deliberadamente la ración de forraje para
los machos. Lo que se puede hacer en este caso con las distinciones ya
expuestas es enunciar sus interfases así:
I. Conductual/ emic: no se deja morir a los terneros de hambre.
II. Conductual/etic: se deja morir a los terneros de hambre.
III. Mental/emic: todos los terneros, sin importar el sexo, tienen derecho a la
vida.
IV. Mental/etic: se debe dejar morir de hambre a los terneros machos cuando
escasee el forraje.16
La razón por la que esto parecía estar sucediendo era que en esa región
específica de la India, no eran necesarios los bovinos de tiro, es decir lo
machos, por lo que era insostenible mantenerlos, se necesitaba más bien a las
vacas productoras de leche y queso y en una tendencia inconciente
desentrañada por el investigador se observó una relación entre las condiciones
ecológicas y sistémicas del entorno material que determinaban un bovicidio
selectivo por sexos según las exigencias del ambiente y los nativos.
Las distinciones anteriores son totalmente necesarias para la formulación del
principio fundamental del materialismo cultural, que es el siguiente, en una
formulación más precisa: "los modos de producción y reproducción
conductuales etic determinan probabilísticamente las economías doméstica y
política conductuales etic, que a su vez determinan las superestructuras
conductual y mental emic. Para abreviar, podemos calificar a este principio de
14 HARRIS, Marvin. El desarrollo de la teoría antropológica. Trad. Ramón Valdes del Toro. Siglo
veintiuno de España, Madrid, 2003, p. 493.
15 15 Ibíd., p. 497.
16 16 Op. Cit. HARRIS, Marvin. 1987, p. 54
7
determinismo infraestructural".17 Como primera reflexión cabe decir: las
investigaciones propuestas por el materialismo cultural no tienen sesgo ni emic
ni etic, la postulación de flujos de actividades humanas en intersección con las
posiciones interpretativas de los científicos ya prepara un terreno fértil para
incluir en las investigaciones elementos emic y etic que no se constriñe en uno
u otro, como dos extremos de un abismo unido por un puente fabricado por el
investigador, sino que salta entre una visión y otra mientras la investigación se
lleva a cabo y mientras se operacionaliza. La infraestructura conductual etic, tal
como está formulada, supone una ventaja estratégica en la investigación dado
que evalúa las regularidades sujetas a leyes de la naturaleza, esta
infraestructura de los sistemas socioculturales se justifica pues el hombre como
toda forma de vida necesita procurarse medios para la obtención de energía y
también como toda forma de vida se reproduce en una mayor tasa a la que
puede sostener energéticamente su reproducción18.
En un nivel más alejado de la interfase primaria, o infraestructura se
encuentran la estructura y la superestructura. Por razones de las
consideraciones teóricas de este trabajo, será imposible explicar
pormenorizadamente los siguientes nodos interfaciales, sin embargo,
consideramos importante apuntar algunas reflexiones en torno a la interfase
superestructural. En este nodo de las relaciones sociales formadas por la
interacción hombre-naturaleza se evalúa una nueva posibilidad de considerar el
campo tanto conductual como mental y tanto etic como emic. Si ejemplos del
concepto superestructura conductual etic son los ejercicios artísticos (música,
literatura, pintura), la publicidad, los rituales sociales y religiosos, las
actividades deportivas y la ciencia, entonces es evidente que la relación
infraestructura y superestructura no sólo no es estática sino que plantea la
interdependencia orgánica de los dos nodos en tanto los anteriores ejemplos
son generadores de cambio en los procesos sociales. Análogamente, si
ejemplos de la superestructura mental emic son los símbolos, mitos, cánones y
filosofías estéticas, epistemologías, ideologías, magias, religiones y tabúes, no
podemos dejar de pensar en una buena porción de elasticismo del
determinismo infraestructural. Lo que esta consideración de la
interdependencia organísmica entre infraestructura y superestructura nos
sugiere es que: primero, el materialismo cultural no supone una relegación de
la superestructura a epifenómenos mecánicos de corte infraestructural y,
segundo, no hay eliminación alguna de la lucha conciente por la modificación
de la infraestructura sino la desesperanza en la probabilidad de que
innovaciones superestructurales político-ideológicas incompatibles con los
modos de producción y reproducción puedan tener influencia sustancial en el
cambio social.
17 17 Ibíd. p. 72.
18 Posiblemente, este determinismo infraestructural es la mayor dificultad que posee el
materialismo cultural para la consideración de las relaciones sociales en estudios de largos
procesos, este punto será profundizado en el momento en que comencemos a evaluar la teoría
de Norbert Elias.
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